misionesIVE enero 16, 2015 España
Querida Familia Religiosa:
El mes de noviembre ha sido particularmente bendecido por Dios en nuestra pequeña misión de Madrid, España, quien nos ha encomendado un nuevo apostolado: poder ayudar en las Misas que se celebran mensualmente en este lugar santo.
Tres fueron las celebraciones solemnes durante este mes, al conmemorarse el 78 aniversario de la persecución religiosa y testimonio grandioso de fe cristiana.
El 16 de noviembre, el Sr. Obispo de Alcalá de Henares (diócesis a la que pertenece este lugar), Mons. Juan Antonio Reig Pla, presidió una Eucaristía en la capilla de los Mártires de Paracuellos en conmemoración de los beatos que allí descansan. Realizando, a continuación de la Santa Misa, una procesión con el Santísimo Sacramento por todo el Campo Santo.
Anteriormente, el 6 de noviembre, también pudimos participar en la festividad litúrgica de la memoria por los Mártires de la persecución religiosa en España en el siglo XX.
Se estima que cerca de 9.000 personas, entre obispos, sacerdotes, religiosos y laicos, fueron perseguidos, encarcelados y martirizados en este lugar en el corto período de tiempo de Noviembre-Diciembre de 1936. Nunca una tierra ha dado tantos mártires en tan escaso tiempo. Sacados de las cárceles donde llevaban varios meses, murieron cayendo directamente en siete grandes fosas comunes, por no querer renunciar de su fe y sus convicciones, oferta que se les hacía en el último momento para poder salvar su vida.
Gran número de sacerdotes y de consagrados de las 20 órdenes religiosas a las que pertenecían los religiosos martirizados en este lugar, se encomiendan día a día bajo la protección de sus hermanos en la fe que ya gozan de la gloria del Cielo. Hay agustinos, capuchinos, carmelitas, carmelitas descalzos, claretianos, dominicos, escolapios, franciscanos, hermanos de las Escuelas Cristianas, hospitalarios de San Juan de Dios, jerónimos, jesuitas, marianistas, maristas, misioneros oblatos, paúles, pasionistas, redentoristas, Sagrados Corazones de Jesús y María así como salesianos. De entre todas las víctimas de este holocausto de Paracuellos, 145 ya han sido beatificados en estos últimos años.
Podemos decir “que los beatos de Paracuellos fueron requeridos por la Divina Providencia para dar testimonio, hasta el martirio, como testigos de la Fe. Amaron y perdonaron a quienes les tenían por enemigos con la certeza de la vida eterna. Sabían que su muerte no sería en balde; a ellos, Dios los llevó a su presencia, pero su sangre también se constituyó en semilla de nuevos cristianos y oración por la Iglesia, oración por sus verdugos, oración por el perdón y la reconciliación, oración por la paz, oración por España”… es un llamado para todos nosotros a vivir la conversión radical del alma y dar testimonio de nuestra fe hasta las últimas consecuencias.
Damos gracias a Dios por encomendar a nuestra Familia Religiosa tan alta gracia… en definitiva para mostrarnos “un signo más de su favor, porque Él siempre nos ayuda y nos consuela” y pedimos a la Santísima Virgen, nuestra Madre, que acompañe nuestra vocación y entrega en bien de la Iglesia y para mayor gloria de Dios…
Servidoras en Madrid
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